ÉGLOGA EN HEXÁMETROS


          Lícidas -Coridón -Poeta 

POETA

Lícidas y Coridón, Coridón el amante de Filis,
pastor el uno de cabras, el otro de blancas ovejas,
ambos a dos tiernos, mozos ambos, árcades ambos,
viendo que los rayos del sol fatigaban el orbe
5 y que vibrando fuego feroz la canícula ladra,
al puro cristal, que cría la fuente sonora,
llevados del son alegre de su blando susurro,
las plantas veloces mueven, los pasos animan
y al tronco de un verde enebro se sientan amigos.
10 Tú, que los erguidos sobrepujas del hondo Timavo
peñones, generoso Duque, con tu ínclita frente,
si acaso tocare el eco de mi rústica avena
tus sienes, si acaso llega a tu fértil abono,
Francisco, del acento mío la sonora Talía,
15 oye pío, responde grato, censura severo.
No menos al caro hermano generoso retratas,
que al tronco prudente sigues, generoso naciste
héroe, que guarde el cielo dilatando tus años.
Lícidas y Coridón, Coridón el amante de Filis,
20 pastores, las Musas aman, recrearte desean.
Tú, cuerdo, perdona en tanto la bárbara Musa
que presto, inspirando Peán con amigo coturno,
en trompa, que al Olimpo llegue por el ábrego suelta,
tu fama llevarán los ecos del Ganges al Istro,
25 y luego, torciendo el vuelo, del Áquilo al Austro.
Febo la cumbre seca, que su luz a la sombra recoge,
Procne lamenta grave, Venus arde, la fuente susurra,
el fresco arroyuelo ríe, y el aire se crespa.
Lícidas entonces: "Coridón discreto", le dice,
30 "en tanto que el viento fresco se mueve ligero,
bullendo las blancas aguas, regalando las hojas,
suena, zagalejo, y al son de tu cítara canta."
"¡Oh, cuán agradable, oh, cuán dulce al árcade suelo,
cuán pío", responde Coridón, "al céfiro blando
35 el tuyo será sin duda, si, Lícidas, cantas!"

LÍCIDAS

No burles, Coridón; Coridón, no burles, amigo;
usa de lenguajes píos y el irónico deja.

CORIDÓN

No burlo, verdades hablo, verdades abono;
Lícidas, ingrato pagas al amor que te muestro,
40 viendo que, si pago, debo más a tu dulce lisonja.
Mas ya que el señor de Delo nos iguala su curso,
mediando con luz hermosa la cuarta morada,
ea, dale al viento, dale ya la bucólica Musa,
y en premio del canto pío, de mi parda manada
45 escoge un cabrito luego de presta viveza,
ya tierno, ya grande sea, ya tu blanca le junta.


LÍCIDAS

No el premio, Coridón, sólo tu consejo recibo;
por tanto, prevente agora, ya mi cítara sigue.


CORIDÓN

Suena la dulce chelys, dame pie, que tu cítara sigo.


LÍCIDAS

50 Mueve, sonora Clío, dale voz a mi rústica Musa.
Páramos de Arcadia, que miráis de mi dulce Licoris
los ojos, la blanca mano, la frente serena,
con ramas, con verdes hojas, con amable susurro
al viento, que os brinda pío, celebralda süaves.


CORIDÓN

55 Mueve, sonora Clío, dale voz a mi rústica Musa.
Praderas del verde suelo que el Ménalo cría,
Filis os ha pisado; mirad que mi Filis amena
al Mayo produce flores; si os obliga su planta,
al viento, que os brinda pío, celebralda süaves.


LÍCIDAS

60 Mueve, sonora Clío, dale voz a mi rústica Musa.
Si Mopso templó las iras de su dura Fenisa
y menos tibio llenó de requiebros el aire,
¿qué, ingrata pastora, temes? ¿qué recelas, amante,
en tanto que a Mopso miras y a Fenisa casados?


CORIDÓN

65 Mueve, sonora Clío, dale voz a mi rústica Musa.
Dichoso por cierto miras tu cónyuge, Mopso;
ingrata mostró su hielo, mas fuéte mudable.
jOh, quién Mopso fuera, si Mopso a Filis amara!
Mas, Coridón, ¿qué temes, Coridón, si ya quiere Fenisa?


LÍCIDAS

70 Mueve, sonora Clío, dale voz a mi rústica Musa.
Ya las avecillas tímidas lograrán su manida
sin riesgo del grave daño del sacre pirata;
no se promete menos de tu boda, rebelde Fenisa;
gózala mil años, y tú Mopso, otro tanto la goza.


CORIDÓN

75 Mueve, sonora Clío, dale voz a mi rústica Musa.
Mil años, pastora, vivas; mil años a Mopso
goces, amando pía, ya que Mopso es amante süave;
y tú, dichoso vaquero, a los hados amigo,
libre de sospechas goces a tu dulce Fenisa.


LÍCIDAS

80 Mueve, sonora Clío, dale voz a mi rústica Musa.
Seis veces el verde soto coronó su cabeza
de nardo, de amarillo trébol, de morada vïola,
en tanto que el pecho frío de mi casta Licoris
al rayo del ruego mío deshizo su hielo.


CORIDÓN

85 Mueve, sonora Clío, dale voz a mi rústica Musa.
Seis veces la florida Venus con afeite de nácar
discreta sazonó la rosa, y discreta mi Filis,
seis veces oyó mi chelys, seis veces, y dijo:
"Venciste, Coridón; tu voz de sirena me vence."


LÍCIDAS

90 Mueve, sonora Clío, dale voz a mi rústica Musa.
Mas cese la dulce chelys; los brazos apresta,
los brazos te pido, Coridón, los brazos, amigo;
goce de tus brazos, pues yo de tu música gozo,
y en tanto, paced vosotras, paced, mis ovejas.

            volver inicio

     copyright © www.vallenajerilla.com