Historia

   Los primeros milenios de la vida de nuestro planeta nos resultan tan apasionantes como desconocidos. Si el visitante pudiese viajar atrás en el tiempo descubriría que en La Rioja, durante el periodo Cretácico, era una tierra poblada de dinosaurios, Una región cubierta por bosques de árboles ignatos, húmedos e impenetrables, tierras, cielos y aguas colonizadas por especies animales increíbles de las que hoy nos quedan sus huellas labradas en la roca. Huellas de todos los tamaños, de diferentes espacios, rastros y fósiles, todo ello lo podrá ver el viajero en La Rioja, permitiéndole acercarse a un mundo desaparecido y desconocido....Un mundo apasionante.
   En la Rioja Baja, podemos contemplar miles de icnitas (huellas fosilizadas de dinosaurios). La ruta comienza en Munilla (yacimiento Canal de Peñaportillo) y nos lleva a Enciso, con el importante yacimiento de Valdecevillo. En Cornago, el yacimiento del Barranco de Los Cayos guarda huellas de feroces dinosaurios carnívoros. De camino a Igea encontramos un tronco fósil, magnífico ejemplo de fosilización vegetal. Se completa tan singular viaje al pasado visitando también los yacimientos de Préjano, Navalsaz, Soto en Cameros, El Villar, Muro de Aguas, Grávalos, Cabezón, Peroblasco, Villarroya y otros muchos términos riojanos.